Diferencias entre pirólisis y aquálisis en la limpieza del horno a vapor
La cocina con horno a vapor está repleta de ventajas. No necesitas emplear tantas grasas o aceites. Puedes realizar otras actividades mientras la comida se va preparando y la cocina se mantiene recogida permitiéndote trabajar en otros de los platos del menú. El verdadero problema aparece después, en cómo limpiar el horno sin que te lleve demasiado tiempo y esfuerzo. Con los hornos autolimpiables ya no tendrás que pensar en esto nunca más. Los hornos de AEG te ofrecen todas las facilidades de la pirólisis, la aquálisis y la limpieza con vapor, para que no tengas que preocuparte de la limpieza de tu horno. Ante tantas soluciones innovadoras, a la hora de elegir, la pregunta es: ¿aquálisis o pirólisis?
¿Es cierto que hay hornos que se limpian solos? Descubre los hornos de vapor pirolíticos
Este tipo de electrodoméstico está de moda y es el futuro de todas las cocinas. Los hornos de vapor con limpieza pirolítica proporcionan todas las ventajas de una modalidad de cocción muy cómoda y saludable y eliminan el principal inconveniente: la limpieza convencional.
Su nombre lo dice todo: autolimpieza. Es decir, el horno se limpia solo. Con un horno de vapor pirolítico no tendrás que preocuparte por buscar el método más efectivo para limpiarlo porque él solo se encarga de hacer el trabajo sucio. Y nunca mejor dicho. Mientras que el método tradicional era el de enfundarse los guantes y eliminar la grasa con un estropajo, agua y jabón, con la limpieza pirolítica no tendrás que rascar la suciedad, emplear productos desincrustantes de la grasa o ponerlo todo perdido. Y si no dispones de un horno pirolítico, te recomendamos que revises nuestra guía sobre cómo limpiar el horno a fondo y sin esfuerzo.
Tipos de sistemas de autolimpieza del horno a vapor
Estos métodos de limpieza se han convertido en un rasgo distintivo de las principales marcas de electrodomésticos. Por este motivo, cada una decide denominarlos de un modo particular. Con todo, la esencia de todas estas funciones es siempre la misma y los métodos de autolimpieza de horno actuales se pueden resumir en tres:
1. Pirólisis o limpieza pirolítica
El horno pirolítico emplea un sistema que consiste en elevar la temperatura del electrodoméstico hasta los 500ºC, de tal manera que la materia orgánica presente en las paredes de la cavidad quede reducida a cenizas. La intensidad de la limpieza se puede regular dependiendo de la cantidad de suciedad presente en el horno con función vapor, rebajando la temperatura en el caso de que no haya necesidad de una limpieza a fondo. No obstante, lo más eficaz es realizar el programa completo cada 10 usos aproximadamente y sacarle partido a todas las ventajas de este sistema de limpieza del horno. Al final del proceso bastará con pasar una bayeta húmeda por el interior y retirar sin esfuerzo las cenizas que han quedado de la grasa.
¿Cómo es la limpieza de un horno de vapor pirolítico? La pirólisis es un eficiente programa de lavado que se encarga de dejar el interior de tu horno reluciente en función de la frecuencia de uso, actuando, no sólo contra la suciedad, sino también contra las bacterias y los gérmenes. En definitiva, una limpieza total en apenas unos minutos.
2. Aquálisis: el AquaClean de AEG
Consiste en la limpieza de hornos mediante el empleo de agua, pero no de la manera tradicional. Un horno de vapor con aquálisis necesita de una pequeña cantidad de agua y jabón en la base de la cavidad, que será la encargada de reblandecer la grasa para su fácil eliminación. Normalmente el horno se calienta a 270ºC, por lo que la limpieza no es tan intensa como en el caso de la pirólisis, pero igualmente efectiva si se realiza después de cada uso. Esto es lo que equivale a la función de limpieza AquaClean en los hornos AEG. Proporciona resultados excelentes en apenas unos minutos y sin necesidad de emplear ningún componente químico en la limpieza de tu horno a vapor.
3. Horno autolimpiable de vapor
La autolimpieza al vapor o steam cleaning de AEG tiene un funcionamiento similar. La única diferencia es que el agua que se emplea para generar vapor se vierte en un compartimento especialmente destinado para ello. Con el calor del horno y la generación del vapor la grasa más incrustada se despega de las paredes en cuestión de minutos. Notarás el poder del vapor en cuanto abras la puerta de tu horno y te darás cuenta de que ya está listo para dejarlo reluciente con tan solo pasarle una bayeta.
Puedes revisar la guía de compra de hornos de vapor AEG para poder elegir el que mejor se adapte a tus necesidades.